viernes, 14 de septiembre de 2012

Escucho atentamente todo lo que dice mi Señor Jesús.


Marcos 4:35-40; Josué 1:5-9; Hebreos 10:35-11:1; Salmo 91:10; Marcos 11:22-25

Ese día al anochecer, les dijo a sus discípulos: --Crucemos al otro lado. Dejaron a la multitud y se fueron con él en la barca donde estaba. También lo acompañaban otras barcas. Se desató entonces una fuerte tormenta, y las olas azotaban la barca, tanto que ya comenzaba a inundarse.  Jesús, mientras tanto, estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal, así que los discípulos lo despertaron. --Maestro --gritaron--, ¿no te importa que nos ahoguemos?  Él se levantó, reprendió al viento y ordenó al mar: --¡Silencio! ¡Cálmate! El viento se calmó y todo quedó completamente tranquilo. --¿Por qué tienen tanto miedo? --dijo a sus discípulos--. ¿Todavía no tienen fe?

Durante todos los días de tu vida, nadie será capaz de enfrentarse a ti. Así como estuve con Moisés, también estaré contigo; no te dejaré ni te abandonaré. "Sé fuerte y valiente, porque tú harás que este pueblo herede la tierra que les prometí a sus antepasados. Sólo te pido que tengas mucho valor y firmeza para obedecer toda la ley que mi siervo Moisés te mandó. No te apartes de ella para nada; sólo así tendrás éxito dondequiera que vayas. Recita siempre el libro de la ley y medita en él de día y de noche; cumple con cuidado todo lo que en él está escrito. Así prosperarás y tendrás éxito.  Ya te lo he ordenado: ¡Sé fuerte y valiente! ¡No tengas miedo ni te desanimes! Porque el Señor tu Dios te acompañará dondequiera que vayas."

Así que no pierdan la confianza, porque ésta será grandemente recompensada. Ustedes necesitan perseverar para que, después de haber cumplido la voluntad de Dios, reciban lo que él ha prometido.  Pues dentro de muy poco tiempo, "el que ha de venir vendrá, y no tardará.  Pero mi justo vivirá por la fe. Y si se vuelve atrás, no será de mi agrado." Pero nosotros no somos de los que se vuelven atrás y acaban por perderse, sino de los que tienen fe y preservan su vida. Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve.

Ningún mal habrá de sobrevenirte, ninguna calamidad llegará a tu hogar.

 --Tengan fe en Dios --respondió Jesús--.  Les aseguro que si alguno le dice a este monte: 'Quítate de ahí y tírate al mar', creyendo, sin abrigar la menor duda de que lo que dice sucederá, lo obtendrá. Por eso les digo: Crean que ya han recibido todo lo que estén pidiendo en oración, y lo obtendrán.  Y cuando estén orando, si tienen algo contra alguien, perdónenlo, para que también su Padre que está en el cielo les perdone a ustedes sus pecados.


DECLARACION DE FE DE ACUERDO A LA PALABRA DE DIOS.


Cuando las cosas parecen sin esperanza en el mundo natural y las tormentas de la vida son una amenaza, primeramente escuchare lo que el Espíritu Santo me dice en la Palabra de Dios para obedecerlo y ponerlo por obra, con la confianza plena que el Señor Jesús esta conmigo.  Por lo tanto, no tendré ningún  temor sino que saldré victorioso, por la fe (confianza en la Palabra de Dios), le hablo a cualquier situación que este enfrentando y le ordeno que se alinee con la voluntad perfecta de Dios, en el Poderoso Nombre de  Jesús.

Si no has recibido a  Jesús tú Señor, te invito a  hacer  la siguiente oración creyendo en tu corazón y Jesucristo será tu Salvador:
Padre Celestial, vengo a ti en el nombre de Jesús. Tu Palabra dice: «Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo» y «que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo» (Hechos 2:21; Romanos 10:9). Dijiste que sería salvo cuando el Espíritu Santo venga a morar en mí y me haga nacer de nuevo (Juan 3:5-6, 15-16; Romanos 8:9-11), y que si te lo pido, seré lleno del Espíritu y podré hablar en otras lenguas (Lucas 11:13; Hechos 2:4).
Confío en tu Palabra. Confieso que Jesús es el Señor y creo en mi corazón que lo resucitaste de entre los muertos. Gracias por entrar a mi corazón, por darme tu Santo Espíritu como lo prometiste y por ser el Señor de mi vida. Amén.

Si tus has hecho esta oración escríbeme o esta Palabra te bendice favor de hacérmelo saber.

Nota: Este blog esta todos los días en la misma dirección, búscalo y compártelo con tus amigos y familiares.