sábado, 10 de septiembre de 2011

¡Alabad al Señor Jesús!


1 Crónicas 16:8-11; Salmo 105:1-7; Deuteronomio 4:9-10, 29, 40; Mateo 6:33; Romanos 8:9
¡Alabad a Jehová,  invocad su nombre, dad a conocer entre los pueblos sus obras!  ¡Cantad a él,  cantadle salmos;  hablad de todas sus maravillas! ¡Gloriaos en su santo nombre;  alégrese el corazón de los que buscan a Jehová! ¡Buscad a Jehová y su poder; buscad su rostro continuamente!

¡Alabad a Jehová,  invocad su nombre, dad a conocer sus obras entre los pueblos!    ¡Cantadle,  cantadle salmos!   Hablad de todas sus maravillas. Gloriaos en su santo nombre;  Alégrese el corazón de los que buscan a Jehová. ¡Buscad a Jehová y su poder;  buscad siempre su rostro! Acordaos de las maravillas que él ha hecho,  de sus prodigios y de los juicios de su boca, vosotros,  descendencia de Abraham su siervo,  hijos de Jacob,  sus escogidos.  Él es Jehová,  nuestro Dios;  en toda la tierra están sus juicios.

Por tanto,  guárdate y guarda tu alma con diligencia,  para que no te olvides de las cosas que tus ojos han visto ni se aparten de tu corazón todos los días de tu vida;  antes bien,  las enseñarás a tus hijos y a los hijos de tus hijos.  El día que estuviste delante de Jehová,  tu Dios,  en Horeb,  cuando Jehová me dijo: Reúneme el pueblo,  para que yo les haga oír mis palabras,  las cuales aprenderán para temerme todos los días que vivan sobre la tierra,  y las enseñarán a sus hijos",

Pero si desde allí buscas a Jehová,  tu Dios,  lo hallarás,  si lo buscas de todo tu corazón y de toda tu alma

Guarda sus estatutos y sus mandamientos,  los cuales yo te mando hoy,  para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti,  y prolongues tus días sobre la tierra que Jehová,  tu Dios,  te da para siempre".

Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia,  y todas estas cosas os serán añadidas.

Pero vosotros no vivís según la carne,  sino según el Espíritu,  si es que el Espíritu de Dios está en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo,  no es de él.


DECLARACIÓN DE FE DE ACUERDO A LA PALABRA DE DIOS

Estoy muy agradecido por lo que mi Padre Celestial ha hecho por mí. Continuamente invoco Su Santo Nombre y doy a conocer Sus obras entre la gente.  Soy muy diligente en mi adoración.  Canto Sus alabanzas continuamente y medito en Su Palabra y la comparto sin cesar. Mi corazón se regocija en Su presencia! Constantemente busco  Su Rostro con todo mi corazón.  Todo mi ser adora y ama al Señor Jesús y continuamente reconozco Su presencia dentro de mí.


Si no has recibido a  Jesús tú Señor simplemente has la siguiente oración creyendo en tu corazón y Cristo será su Salvador:

Padre Celestial, vengo a ti en el nombre de Jesús. Tu Palabra dice: «Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo» y «que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo» (Hechos 2:21; Romanos 10:9). Dijiste que sería salvo cuando el Espíritu Santo venga a morar en mí y me haga nacer de nuevo (Juan
3:5-6, 15-16; Romanos 8:9-11), y que si te lo pido, seré lleno del Espíritu y podré hablar en otras lenguas (Lucas 11:13; Hechos 2:4).
Confío en tu Palabra. Confieso que Jesús es el Señor y creo en mi corazón que lo resucitaste de entre los muertos. Gracias por entrar a mi corazón, por darme tu Santo Espíritu como lo prometiste y por ser el Señor de mi vida. Amén.

Si tus has hecho esta oración escríbeme a la siguiente dirección: enriqueibarra.@integra.com.sv