viernes, 4 de marzo de 2011

Alabo a Jesús e Invoco Su Nombre


1 Cronicas  16:8-11
¡Alabad a Jehová, invocad su nombre, dad a conocer entre los pueblos sus obras!
¡Cantad a él, cantadle salmos; hablad de todas sus maravillas!
¡Gloriaos en su santo nombre; alégrese el corazón de los que buscan a Jehová!

¡Buscad a Jehová y su poder; buscad su rostro continuamente!

DECLARACIÓN DE FE DE ACUERDO A LA PALABRA DE DIOS.

Estoy muy agradecido por lo que mi Padre Celestial ha hecho por mí. Continuamente invoco Su Nombre y doy a conocer sus obras en mi vida a toda la gente. Soy diligente en mi adoración hacia Jesús. Voy a cantar sus alabanzas continuamente. Medito y hablo de sus obras sin cesar. Mi corazón se regocija en Su Presencia! Constantemente y con todas mis fuerzas le busco.  Rindo mi corazón a Jesús reconociendo continuamente Su Presencia dentro de mí.

Si tú no has hecho a Jesús tú Señor y Salvador te invito a que te rindas a Él,  porque Él pagó un precio alto por ti en la cruz del calvario, recíbelo,  Él ha resucitado y quiere hacer morada en tu corazón.

Declare esta oración con fe y Jesús hará morada en ti hoy y será tu Señor:

Padre Celestial, vengo a ti en el nombre de Jesús.  Tu Palabra dice: «Y todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo» y «que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo» (Hechos 2:21; Romanos 10:9).

 Señor, tu dijiste que cuando el Espíritu Santo venga a morar en mí y me haga nacer de nuevo (Juan 3:5-6, 15-16; Romanos 8:9-11), y que si te lo pido, seré lleno del Espíritu Santo y podré hablar en otras lenguas (Lucas 11:13; Hechos 2:4).  Creo en tu Palabra. Confieso que Jesús es el Señor y creo en mi corazón que lo resucitaste de entre los muertos. Gracias por entrar a mi corazón, por darme tu Santo Espíritu como lo prometiste y por ser el Señor de mi vida. Amén.