Proverbios 9:10-12; Efesios 1:17-23; 2 Timoteo 1:12; Isaías 46:4; 1 Juan 3:1; 3 Juan 2
El temor a YAHWEH es el principio de la
sabiduría, y el consejo de los santos es entendimiento, ( porque conocer la Palabra
es el carácter de una mente sana.) Porque conmigo tus días serán aumentados;
años serán añadidos a tu vida. Si eres
sabio para ti mismo, serás sabio para tus vecinos; pero si eres probado
perverso, tú sólo cargarás con el mal.
El Dios de nuestro Señor Jesús, el Padre glorioso, que les dé el Espíritu
de sabiduría y revelación, para que así puedan tener pleno conocimiento de El. Yo oro que Él les dé luz a los ojos de sus
corazones, para que entiendan la esperanza a la cuál los ha llamado; cuales son
Sus riquezas en Gloria que hay en la herencia que Él ha prometido a Su pueblo; y qué supereminente grandioso es Su poder
obrando en nosotros, los que confiamos en El. Actúa con la misma fuerza
poderosa que El usó cuando levantó a Jesús
de los muertos y lo sentó a Su mano derecha en el cielo, por encima de todo
gobernador, autoridad, poder, dominio o cualquier otro nombre que se pueda
mencionar en este siglo o en el venidero. También Él ha puesto todas las cosas bajo
sus pies y se hizo la cabeza sobre todas las cosas para la iglesia, que es
Su cuerpo, la expresión máxima de El, quién llena toda la creación.
Para que nosotros, que anteriormente pusimos nuestra confianza en el Cristo,
le alabáramos como corresponde con su Gloria.
Yo soy El, hasta que ustedes se hayan puesto viejos. Yo soy El, Yo los
cargo, Yo he hecho, Yo aliviaré; sí, Yo los cargaré y los salvaré.
¡Miren qué amor ha derramado el Padre sobre nosotros, permitiendo que
seamos llamados hijos de YAHWEH! Porque eso es lo que somos. La razón por la
cual el mundo no nos conoce, es porque no le conoció a El.
Querido amigo, estoy orando que todo prospere contigo, y estés en buena
salud, igual como sé que estás prosperando en el espíritu.
DECLARACION DE FE DE ACUERDO A
LA PALABRA DE DIOS.
Conozco al Señor Jesús
a quien sirvo, entiendo la inmensidad de Su poder y gloria, y sé que sin Él no
tengo gran significado. Tengo respeto inconmensurable por mi Padre Celestial. Tiemblo ante Su grandeza y honor con cada fibra
de mí ser. ¡Qué alegría es saber que Él es mi Padre! No existiría sino fuera
por El – ¡Y estoy en Él! El Señor Jesús es
bueno y misericordioso conmigo. A través
del entendimiento que me ha dado, ha añadido muchos años a mi vida y me ha dado
gozo, salud, y prosperidad para disfrutar la Vida abundante que solo Él me
puede dar. ¡Es un placer y un
privilegio servirle a mi Padre Celestial!
Si no has recibido a Jesús tú Señor simplemente has la siguiente
oración creyendo en tu corazón y Cristo será su Salvador:
Padre Celestial, vengo a ti
en el nombre de Jesús. Tu Palabra dice: «Y todo aquel que invocare el nombre
del Señor, será salvo» y «que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor,
y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo»
(Hechos 2:21; Romanos 10:9). Dijiste que sería salvo cuando el Espíritu Santo
venga a morar en mí y me haga nacer de nuevo (Juan 3:5-6, 15-16; Romanos 8:9-11), y que si te lo pido, seré lleno del
Espíritu y podré hablar en otras lenguas (Lucas 11:13; Hechos 2:4).
Confío en tu Palabra.
Confieso que Jesús es el Señor y creo en mi corazón que lo resucitaste de entre
los muertos. Gracias por entrar a mi corazón, por 0darme tu Santo Espíritu como
lo prometiste y por ser el Señor de mi vida. Amén.
Si tus has hecho esta oración escríbeme o esta Palabra te bendice favor
de hacérmelo saber.
Hosanna.enriqueibarra@gmail.com